Estudies lo que estudies, si consigues estar completamente atento a las explicaciones del profesor en todas las asignaturas es porque, básicamente, has nacido con el don de la concentración humana. En cambio el resto de los mortales necesitamos una pequeña ayuda para no quedarnos dormidos en clase. No todos los docentes son igual de inspiradores que el profesor Keating, pero los puntazos de algunos son auténticas lecciones de genialidad para la universidad de la vida.
a continuación algunas claves para ello:
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